7/29/2005

Otras veces se cree que acicalarse el pensamiento aclara el espacio fuera de uno; no obstante, el constante arribo de piojos, y demás parásitos o basurita que molestan y ensucian, es necesario, ese arribo, para no comprar un hilo rosa y tejerse una burbuja.

7/27/2005

El instinto, la voluntad del ser humano, como especie, es el mejoramiento, el progreso, y la felicidad es un gorila afeitándose a escondidas.

7/26/2005

Respecto al post anterior, publicado ayer, parafraseo a Swift: Qué razón tiene, me digo cuando leo un fragmento de un autor cuya opinión concuerda con la mía. En caso contrario, declaro que se equivoca.
Por eso, respecto al siguiente post. publicable mañana, declaro que se equivoca.
Y, respecto a este post, publicado hoy, sugiero, después de leerse, y con un afán mero curioso: ejecutar el movimiento de rotación, sin tratar de obtener la visión intuitiva.

7/25/2005

"...recurría a un movimiento de rotación sobre sí mismo, excitándose en acelerarlo; cuando llegaba a ser muy vertiginoso, se le desvanecían las cosas sensibles, debilitábasele la imaginación y las demás facultades que necesitan de órganos corpóreos, fortaleciéndose, en cambio, la acción de su esencia que está libre del cuerpo[...] su entendimiento quedaba puro[...] y obtenía la visión intuitiva..."

Fragmento de EL FILÓSOFO AUTODIDACTO de Ibn Tufayl

7/18/2005

Bebo café. Sonrío. Miro, al levantar una ceja incrédula, por la ventana. Vuelvo al hábito, y ya habito, acostumbrado, entre mis paredes. Acomplejo, que no complico, los enunciados tras razonamientos y tragos amargos. Se me ocurre salir, caminar. Intuición cuestionada: ¿hacia adelante se avanza?, ¿hacia dónde dije?
Cuál es el rumbo de todos, quienes ofuscados por el pensamiento, preferimos abrir el reposet y abrazar el destello de imágenes inconexas que nos hacen beber, sonreír, mirar; y provocan la necesidad de salir. Vuelvo al hábito.
Saco una rodilla por la ventana, aprieto mi nariz y me doblo una oreja; tal vez Swift levantaría la mano si me viera desde abajo. La gente camina sin saberlo, en conjunto, como especie: un mecanismo o instinto los conduce hacia certezas necesarias; inexplicables, ¿hacia dónde dije?
Imagino una lámpara oxidada; y la apago.

7/17/2005

Todo era armonía hasta que supimos que era un pozo el que escarbábamos
tranquilo hasta que de entre trapos un grito escurrió
trivial hasta el lamento apretado con estropajo
hasta que el lodo encima
todo era

7/10/2005

dos puntos: he aquí el suceso: punto quería convertirse en coma y así, junto al otro punto, compartir la dicha se ser; de ser punto y coma. la idea parecía irreal. cómo, exclamaba el otro punto, cómo coma, cómo. punto, indignado, dejó al otro punto sin la dicha que, con él, quería compartir. no soportó y con el tiempo comenzó su transformación a coma, después de estudios psicológicos y médicos, coma pudo realizarse sin problemas, dejó de ser punto, y punto.
en cuanto al otro punto. casi por desdén intentó convertisrse en un abyecto_guion bajo. autocrítico y sin ayuda profesional superó el problema. más tarde se le vio bastante liberal y bien acompañado de otros puntos...
coma, ahora, vive feliz, y, frecuentemente, alterna en los textos, pues le encanta aparecer en ellos, por suerte, o bien por desgracia, pensaría el otro punto, alterna, pues, en los textos con algún otro punto; y, en ocasiones espontáneas, se sale de contexto (prefiere, claro está, estar entre paréntesis). digo, coma

7/08/2005

Con la aguja daño el tacto
que de mis dedos proviene, el hilo
no eslabona ni es la bola
de donde surge el quejido del tejido.

Coso, zurzo y no logro al agujero
reunir por sus remiendos, ni unir
al estambre con la aguja como ciego.

Por el ojo angosto de la aguja veo que el hilo
es endeble y vacilo a embocarlo, a prenderlo del remedo,
cavilo y otra vez, como otro día, pierdo el hilo.

7/06/2005

Perfecto. Para quienes, más por resignación que por simpatía, han afirmado que uno de los logros de la cuasi-transición democrática, en este apreciado país, ha sido: la firme eliminación de la censura y la obtención de la libertad para expresarse; es de mi infortunio informarles que en estados como el mío eso no sucede. Paracaídistas, por supuesto que patrocinados por los principales porristas de Madrazo 2006, han invadido el taller de impresión de un periódico que, si bien no es subversivo y juvenil, al menos, es controlado por la oposicón al gobierno priísta. En una de esas coincidencias espacio-tiempo, resulta que las oficinas de dicho diario han sido bloqueadas, hasta nuevo aviso, por una confederación mesozoica que amablemente vela por los intereses de los trabajadores, pero, jocosa y decididamente, por la puerta de atrás, éstos continúan con su labor clandestina. Así es. Ante la frustración, nada mejor que abuso de adverbios, mal uso de comas; y del punto y coma. Punto.

7/05/2005

Caray. Caray caray. Así que esto es la patria, murmura un tipo a mis espaldas. Pienso en lo que escucho, salgo del aeropuerto, huelo la madrugada, tomo un taxi y entro al viaducto; extrañó México, pregunta el chofer, muevo la cabeza de arriba a abajo; cuánto tiempo anduvo fuera, dice, respondo, dice: uy de lo que se perdió, sonríe y mueve la cabeza de izquierda a derecha, vuelve a reír y río diplomaticamente. Con sólo un mes de ausencia, al regreso, le digo, se siente que algo anda mal; prenda la tele, respondé y ríe. Sabio el taxista, pienso, no hay nadie despierto a esta hora, jalo aire, huelo la ciudad e imagino un pozo.

Yo, como dicen que digo, en honor a la verdad, había olvidado por completo a Memín Pinguín, es decir, de dónde, cómo y para qué ha revivido en estas dimensiones; me huele a negocio. Cada estimulación, cada movimiento uniforme, cada inclinación absurda hacia el consumo me huele a dólar, a plan, a premeditación. No me indigna que los gringos reclamen, reconozco que son hipocritas y que sus caricaturas han sido en extremo racistas hacia nosotros, nos han estereotipado y ahora vienen, se agarran de la cintura, y se ofenden. No es eso lo que me indigna, temo diatribas en mi contra pero: qué hace Memín Pinguín en una estampilla; sé abundan sus fanáticos, pero ni la tercera parte de quienes ahora lo defienden han leído más de un número de tal revista que, además cabe decir, en mi opinión particular, es infame. En fin; mejor me voy a mi pueblo en donde, por cierto, el racismo es abierto y bien recibido por los gringos, cosa de todos los días y por la que jamás se ha ofendido mexicano alguno. Coincidencias.